jueves, 28 de noviembre de 2013

SEVEN

Se cierra lentamente la puerta. Cuando la rozo con mis dedos empieza arder y queda reducida a cenizas, mi otra mano esta demasiado ocupada acariciando su cabello, cintura, rostro, esta demasiado inquieta, como no, si es mi mano derecha, ella como ya lo he dicho antes es mi consentida, con ella puedo hacer de todo, pero en este momento no quiero robarle el protagonismo a la situación con historias platónicas que se crean en mi estúpida y paradójica mente. ya que la puerta está en cenizas y el picaporte parecía hierro recién fundido me concentro totalmente en lo que esta pasando enfrente de mi dos pupilas dilatadas, han consumido una dosis excesiva de LSD, dejando aparte mis ojos y mirando desde cerca mis labios, están húmedos y muy bien lubricados, pero extrañamente se están tocando y moldeando con otros, que para ser sincero se ven muy provocativos, es un beso que nunca acaba, pero puedo reconocer la ternura que emana aunque es poca ya que predomina mas que todo la pasión, el fuego, la lujuria, rápidamente mi instinto reconoce los jadeos y la respiración entre cortada, como si de un vampiro se tratase bajo a su cuello, la beso y todo su cuerpo se estremece, sus manos  abrazan toda mi espalda y cuando ya la tiene en su poder clava sus uñas y las arrastra, sus piernas empiezan hacer un movimiento bastante peculiar, la beso.
Aun seguimos parados en la entrada de una habitación en penumbra rozando lo que queda de cuerpos con rastros de harapos. Justo detrás de ella reconozco una cama, ella se deja caer de espaldas pero eso si, no suelta mu cuello, caemos desplomados ardiendo y jadeando, una de mis manos quiere mas y baja por su ombligo, no se si mi cerebro ya sabe lo que se ha de encontrar por que cada vez mas no puedo contener aquello que siento por dentro, mi mano llega a un triangulo, yo lo llamo el triangulo de las bermudas, todo hombre que llega hasta allí se pierde, entre gemidos y húmedos besos, no prolongo lo inevitable y la introduzco por debajo de su pequeña ropa interior que ya hace rato había pasado un rió de pasión por ella.
siento que caigo a un vació con música de fondo esa canción la conozco, se llama SEVEN de  AOTP. MIERDA  ya son las 7:00 la rutina empieza con una gran erección. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario